La previa
Lo primero que hay que rescatar de este Instituto modelo 2015/2016 es que llegó a la Liga Nacional por méritos propios, luego de ascender en el durísimo TNA. Luego de esto, la Gloria armó un equipo con el claro objetivo de mantener la categoría. Algunos jugadores nacionales de experiencia (Byró, Zilli), dos foráneos garantidos (Giddens y Cowan), otros elementos con hambre de hacerse conocer en la élite (Martina, Bruna, Mansilla) y los chicos de las inagotables canteras cordobesas.
Todos ellos guiados por Maximiliano Seigorman desde el banco de suplentes, entrenador que dejaba su cargo de director deportivo de la Liga de Desarrollo para agarrar la arriesgada misión de mantener a Instituto en la A.
La primera fase
Ganar el clásico ante Atenas de visitante hizo olvidar la derrota en el debut ante La Unión de local. Sin embargo, el 1-3 trajo las primeras complicaciones, hasta que Seigorman empezó a darle su sello de defensa al equipo y la Gloria mantenía un 4-4 más que aceptable.
La apuesta por Byron Johnson salió mal, e Instituto cerró la fase inicial con un 7-11 que no era malo (más teniendo en cuenta el 3-15 de Atenas) pero que dejaba las alarmas encendidas a futuro. Como puntos altos en esos 18 partidos hay que señalar la victoria en el Cerutti y también el hecho de haberle ganado al puntero Olímpico de La Banda.
La segunda fase
En la segunda etapa del torneo se definía todo y la gente de Instituto lo sabía. Luego de perder ante Olímpico en casa, llegó Hakeem Rollins para aportar su experiencia en la zona pintada, aunque el debut fue en una derrota ante Quilmes en Córdoba que hizo que el registro caiga a 7-13. De la mano de Rollins, Instituto ganó tres de sus cuatro últimos duelos en el 2015 y se fue de vacaciones con un interesante 10-14 que lo dejaba bastante lejos del por ese entonces colista Atenas. El receso llegaba en el Ángel Sandrín con la tranquilidad de tener un trío de extranjeros confiable y el descenso, por ese entonces, muy lejos.
El 2016 empezó con buenas victorias ante Quimsa y Sionista en Córdoba, elevando el registro a 12-14, pero eso dio paso a una racha negra de cuatro derrotas en fila. El 12-18 no era malo, pero Atenas a esa altura ya era otro de la mano de Carlos Romano y la dirigencia de la Gloria cortó por lo sano. Cesanteó a Seigorman y contrató a un Ariel Rearte que había arrancando la temporada en Argentino de Junín. El fixture le hizo un guiño a Rearte ya que debutó con cuatro juegos en el Sandrin. Cuatro victorias, registro de 16-18 y a salir a la ruta con la tranquilidad del deber cumplido en condición de local.
Sendos triunfos como visitante ante San Lorenzo, Ferro y Estudiantes, más la llegada de Enzo Ruiz y Joaquín Baeza, hicieron que el equipo se aleje del descenso (por ese entonces ya Sionista estaba muy complicado) y eleve la vara, pero eso no pasaría de una intención. La Gloria perdió diez de sus últimos once partidos, Regatas Corrientes creció sobre el final, y el equipo rápidamente quedó lejos de la pelea grande. Sin embargo, no sufrió con el descenso, por lo que el objetivo primario estaba más que cumplido ya que Instituto siempre pensó el salvarse. Todo lo que viniera arriba de la permanencia, era una yapa del destino.
Aspectos positivos
La permanencia en la categoría. Si bien siempre se habla de lo extradeportivo, en una competencia como la Liga Nacional es fundamental lo que suceda dentro de la cancha. Instituto buscaba salvarse y lo logró sin mayores contratiempos.
La poca rotación de foráneos. A principios de diciembre encontró en el tridente Rollins - Cowan - Giddens al terceto que terminaría la Liga Nacional. Si bien eran nombres de peso y conocedores de la competencia, la Gloria no los cortó pese a las malas rachas. Algo a destacar dentro de tanto extranjero que va y viene.
Las mejoras en el estadio. Instituto jugó Torneo Federal y TNA en el Ángel Sandrin y supo darse cuenta que su escenario requería de mejoras para jugar la Liga Nacional. Iluminación, piso, luces, aire acondicionado, vestuarios, zona vip y demás. Para aplaudir y más pensando que no era uno de los presupuestos más altos.
Aspectos negativos
El trabajo en prensa y difusión. Fue sencillamente imposible leer una nota a un jugador o integrante del cuerpo técnico de Instituto que no sea realizada por un medio cordobés o alguna web especializada. Además, el straming fue de los peores de la competencia. Cosas a tener en cuenta luego de haber asegurado la permanencia, ya pensando en la 2016/2017.
Leonardo Chianese (@leodeflores)
glorioso cordobes 19/05/2016
Algunas cosas son asi otras no tanto. Lo de prensa y difusion es correcto y los Cavagliatto saben que es es una materia pendiente y a corregir esta nueva liga. El streaming comenzo mal pero con l transcurrir de las fechas se fue acomodando crreo que el problema esta en el ancho de banda o rapidez de internet para mejorar la imagen.Tambien en el conocimiento de los quee filman que no tienn idea de lo que s basquet. Es un club muy ordenadomy ya estan trabajando para la proxima liga. SE OLVIDARON DE MENCIONAR LA LIGA DE DESARROLLO QUE ALCANZO LAS SEMIFINALES EN SU PRIMER PARTICIPACION Y POR MUY POCO NO L GANO AL CAMPEON. VAMOS INSTITUTO N LA PROXIMA TEMPORADA!!!!!!!!
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