Camino a Olavarría, el micro que trasportaba al plantel de Gimnasia sufrió la rotura de un neumático lo que provocó que el juego programado para las 21:30, primero se reprograme para las 22:00 y luego para las 22:15. Esto también forma parte de la historia del partido, porque indudablemente repercutió en el mismo.
Los primeros minutos del juego se vieron dos equipos sin coordinación; sin ritmo, por momento, y con exceso de velocidad, en otros. En ese bullicio, el elenco platense se sentía más cómodo y le planteó un partido incomodo al Bata, que le costó enfocarse en el juego. Recién en los últimos dos minutos del cuarto inicial pudo adueñarse del marcador con una ráfaga de 9-0, para irse ganando 17 a 11.
En el inicio del segundo parcial una seguidilla de puntos de Estudiantes, incluido un triple de “Toti” Brocal – que destacamos porque fue el primero del Bata en seis intentos – pusieron arriba al local por diez. Cuando parecía que Estudiantes tomaba el control definitivo del juego, Gimnasia se puso a cinco y obligó a Juan Siemienczuk a pedir minuto. Tras el refresco de ideas, apareció nuevamente Brocal, desde los 6.75, para apagar la iniciativa del Lobo; el albinegro supo cerrarlo y se fue al descanso largo ganando 37 a 28.
Promediando el tercer cuarto, Gimnasia apoyándose en Sesto, Nazione y Villa volvió a limar la diferencia a cinco, pero nuevamente tras un tiempo muerto Estudiantes golpeó desde tercera dimensión. Tres triples consecutivos decretaron el knock-out de Gimnasia, que ya no tuvo resto para ir a buscar la victoria.
En el último segmento, con Gamazo dominando en la pintura y las penetraciones de Schoppler, Estudiantes fue encaminando el juego hacia una nueva victoria. El lunes recibirá al líder de la Conferencia Sur, Platense, y hay promesa de partidazo.
Informe: Prensa Estudiantes
Monstruo 03/03/2018
Monstruo
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